El sector de la informática está lleno de conceptos que pueden resultar complicados a primera vista. Uno de ellos es la dirección IP. Estamos seguros de que habrás oído hablar de ella, pero ¿tienes claro qué es una dirección IP y para qué sirve?
Te lo explicamos en este artículo sin rodeos para que lo entiendas a la primera.
Qué es una dirección IP y cómo funciona
Una dirección IP (Internet Protocol) es una cadena numérica que identifica a cualquier dispositivo con conexión a Internet mientras se comunica con otros dispositivos a través de la red.
Las direcciones IP se utilizan para guiar datos entre redes, servidores y dispositivos. En definitiva, para que las conexiones lanzadas desde un dispositivo sepan a dónde tienen que ir y cómo regresar en cualquier momento. Sin direcciones IP, los datos estarían perdidos porque no sabrían a dónde viajar.
Por lo tanto, podríamos decir que las direcciones IP son como los códigos postales de Internet. Además, son como una huella digital: únicas. No existen dos direcciones IP exactamente iguales al igual que sucede con la matrícula de un vehículo, cada uno tiene la propia.
Debes saber que no solo los ordenadores tienen dirección IP, sino también las tablets, los smartphones, los televisores inteligentes, impresoras e incluso las páginas web.
La IP está compuesta por cuatro bloques de números espaciados por puntos y cada bloque puede llegar a tener hasta tres dígitos. Para que te hagas una idea, tu dirección IP podría ser un código similar a este: 172.1.635.12 o a este 192.198.3.65.
Si profundizamos un poco más sobre los estándares de las diferentes direcciones IP, veremos que hasta hace un tiempo se utilizaba la IPv4 (Internet Protocol Version 4) que permite aproximadamente 4,3 mil millones de direcciones IP únicas.
Aunque puede parecer mucho, a día de hoy la cifra de dispositivos que se quieren conectar a Internet es superior. Por ello, en los últimos años se ha comenzado a implementar la IPv6 que utiliza 8 bloques de 4 dígitos hexadecimales que, teóricamente, ofrece 340 mil millones de direcciones IP. Para que te hagas una idea, un ejemplo de dirección IP IPV6 sería: 5ffr: 1387: 6565: 8: 700: t4cc: fr54: 28gt.
Cómo funcionan las direcciones IP: ejemplo
Veamos cómo funcionan las direcciones IP con un ejemplo. Cuando te conectas a Internet para enviar un correo electrónico, accedes a una red que está conectada a Internet. Esta red es la de tu proveedor que, posteriormente, te da el acceso a Internet.
Es decir, tu ordenador no se conecta a Internet directamente sino a través de la red de un ISP (proveedor de acceso a Internet). Puede ser la red de tu proveedor de servicios de Internet en casa (Vodafone, Telefónica…), la de tu empresa o la de una cafetería. Tú tocas a la puerta de tu ISP y tu ISP toca a la puerta de Internet y la abre para ti.
Para llevar a cabo este proceso de conexión e intercambio de datos e información, tu ordenador sigue una serie de reglas (protocolos). Dentro de ese protocolo, tu dirección IP se utiliza como una dirección virtual para establecer esa conexión.
Finalmente es tu proveedor ISP quien te da acceso a la red y te asigna una dirección IP que será única e identificará tu dispositivo dentro de Internet. Así, gracias a esa IP podremos enviar y recibir datos sin errores, sabiendo que no se perderán entre los millones de dispositivos que estén conectados a Internet en esos momentos.
Tipos de direcciones IP
Existen varios tipos de direcciones IP. Vamos a explicar en qué consiste cada una de ellas.
Dirección IP privada y dirección IP pública
En los albores de Internet, los desarrolladores creían que cada dispositivo conectado a la red tendría su dirección IP única. Pero a medida que la cantidad de dispositivos que se habilitaban para conectarse a Internet aumentaban, se dieron cuenta de que las direcciones IP eran insuficientes.
El resultado fue habilitar direcciones IP privadas para uso interno y una dirección IP pública para Internet en general.
Cuando te conectas con tu smartphone al Wi-Fi de tu casa, el enrutador te asigna una dirección IP privada que solo pueden ver otros dispositivos dentro de tu red local. Por ejemplo, una impresora Wi-Fi aprovechará esa dirección IP privada para aceptar solicitudes de dispositivos externos como tu ordenador.
Es probable que, en la calle, muchos usuarios tengan un dispositivo con la misma dirección IP privada que tú, pero esto no provoca un conflicto porque las redes están ocultas entre sí.
Por contra, una dirección IP pública es la dirección que otros dispositivos en Internet ven. Esta IP que te conecta con el mundo y es única para ti en ese momento mientras permaneces conectado.
Direcciones IP estáticas y dinámicas
A la hora de clasificar los tipos de dirección IP también podemos establecer la diferencia entre dinámicas y estáticas.
Las direcciones IP dinámicas cambian automáticamente para cada conexión, por tanto, solo están disponibles por un tiempo limitado. Imagina que te conectas a Internet a través de tu router en casa, tu ISP te asigna una IP aleatoria que esté libre en esos momentos.
Cuando finalices la sesión de conexión esa IP pasa a estar disponible para otro usuario y cuando accedas de nuevo a la red tu ISP te otorgará otra IP diferente.
En el lado contrario están las direcciones IP estáticas que no cambian de forma automática. Este tipo de direcciones IP se crean manualmente (por eso suelen conllevar un coste económico superior) y son necesarias cuando configuramos un sitio web, un servidor de datos o un sistema de redes privadas virtuales conocido como VPN, entre otros.
Cómo saber cuál es mi IP según mi sistema operativo
Para averiguar cuál es tu IP debes navegar a la configuración de Wi-Fi o Ethernet independientemente del dispositivo y el software que estés ejecutando. Así deberías hacerlo según el sistema operativo que utilices:
- Averiguar IP en Windows desde el PC: En la barra de tareas, selecciona Wi-Fi o Ethernet > Haz clic en la red a la que estás conectado actualmente > Selecciona Propiedades> Tu dirección IP aparecerá tras «Dirección IPv4».
- Saber IP desde smartphone o tablet Android: Ajustes o configuración > Conexiones o Red e Internet > Selecciona la red Wi-Fi a la que estás conectado > Bajo “Dirección IP” verás el dato que estás buscando.
- Para localizar la IP en un Mac: Preferencias del sistema > Red > Seleccione Wi-Fi o Ethernet, según tu conexión > Tu dirección IP se muestra en la ventana abierta.
- La IP en iPhone o iPad: Ajustes > Wi-Fi > Accede al icono de Info > Su dirección IP se muestra a la derecha de «Dirección IP».
Las mejores herramientas para saber cuál es mi IP
Ahora que ya sabes localizar tu IP privada, que habitualmente comenzará por 192., vamos a ver cómo conocer tu IP pública. Recopilamos las 3 mejores herramientas para saber cuál es mi IP:
- Basta con visitar la página CualesmiIP para descubrir automáticamente tu IP.
- Otra opción similar a la anterior es WhatismyIP.
- La herramienta Whoer también te ayuda a saber cuál es tu IP de una forma rápida nada más acceder a su web.
Otro atajo bastante rápido para conocer tu IP es a través de Google para empresas. Haz la búsqueda “what is my IP” y Google mostrará tu dirección IP en la zona superior de la página de resultados.
Cómo ocultar mi IP: mejores herramientas
La dirección IP hace posible que te puedas conectar a Internet, pero también es puerta de entrada para anunciantes y piratas informáticos. A través de la dirección IP saben dónde tienen que enviarte la información y muchos sitios registran estas direcciones para “espiarte” de forma más efectiva, rastrear tu actividad y ofrecerte anuncios personalizados.
Sin duda, es una estrategia de Marketing Digital muy efectiva porque te muestra publicidad adaptada a tus gustos y esto aumenta las probabilidades de que hagas clic en ella. Asimismo, tu dirección IP también se puede utilizar para geolocalizarte, incluso cuando tengas los servicios de rastreo de ubicación desactivados.
Sin embargo, la IP también puede suponer un problema para el usuario que ve su privacidad invadida. Por eso, muchas personas tienen interés en saber cómo ocultar su IP. Si quieres ocultar tu IP para no ser rastreado hacerlo puedes utilizar las siguientes herramientas:
Usa un navegador Tor (The Onion Router)
Se trata de un software gratuito, operado de forma anónima por miles de voluntarios, que se descarga en tu dispositivo y oculta la IP cada vez que te conectas a la red de forma anónima a través de múltiples capas de cifrado.
El único inconveniente de este sistema es que sacrificarás velocidad porque el encriptado es un proceso que lleva tiempo.
A través de un servidor proxy
Este servidor actúa como intermediario entre tu dispositivo e Internet de tal forma que la IP pública es la del servidor proxy y no tu IP real.
A diferencia de una VPN, la mayoría de los proxies no encriptan su tráfico. Por tanto, tampoco ocultan su dirección IP a nadie que pueda interceptar tu tráfico en su camino desde su dispositivo al proxy. Este tipo de servidores, especialmente los gratuitos, tienden a ser menos confiables que las VPN.
Conectándote a una red Wi-Fi pública
La dirección IP no viaja contigo. Por tanto, si vas a una cafetería o a un gimnasio y accedes a su Wi-Fi, ocultarás de forma temporal tu dirección IP habitual. Utilizarás la dirección IP de su red mientras permanezcas online.
¿El riesgo? La piratería informática. Las redes abiertas son territorio de hackers que pueden aprovechar la falta de cifrado y autenticación para atacar.
También es importante que prestes atención si notas que tu conexión Wi-Fi va lenta porque puede haber usuarios robando tu conexión. En nuestro artículo “cómo saber quién se conecta a mi Wi-Fi” podrás aprender más al respecto.
Utiliza una Red Privada Virtual o VPN para cifrar todo tu tráfico
Se trata de un servicio de software que encripta los datos enviados y recibidos a través de un servidor VPN en otra ubicación. Este servidor actúa como intermediario entre tu dispositivo e Internet. Por lo tanto, los sitios web y las aplicaciones online solo ven la dirección IP del servidor, pero no la tuya.
Un servidor VPN tiene claras ventajas como la velocidad, la seguridad en la conexión y la privacidad. Puedes descubrir otros beneficios en qué es VPN y qué ventajas tiene.
Tú mismo puedes configurar una VPN, aunque nuestro consejo es que acudas a un proveedor sólido porque conlleva un proceso técnico.
Conocer tu IP te hará libre
Pero, ¿por qué debería saber cuál es mi dirección IP? Sencillamente porque conocer este código numérico te ayudará a configurar, administrar y solucionar cualquier tipo de problemas en tu red Wi-Fi. Además, te permitirá ser dueño de tu privacidad.
Si necesitas asesoramiento para conectar un servidor VPN o quieres que configuremos la red informática de tu empresa, ponte en contacto con Sale Systems.