Cualquiera que tenga un negocio con presencia en online reconoce la importancia del SEO para adquirir visibilidad en Internet. Pero solo el 35% de las empresas españolas cuidan su SEO.
Y es que en muchos casos, lo que frena a las pymes a la hora de ocuparse de su posicionamiento en buscadores es el desconocimiento.En Sale Systems queremos ayudarte a conocer más a fondo el Search Engine Optimization, y para ello hablaremos sobre lo primero que debes hacer cuando se trata de posicionamiento web: una auditoría SEO.
El marketing online tiene muchas ramas, y la del SEO es una de las más importantes. ¿La razón? Para que te compren o te contraten tus servicios, lo primero es que lleguen a tu sitio web, tu tienda online, etc. Y el SEO es el que se encarga de conseguirlo.
Es cierto que existen otras formas de marketing que también atraen visitantes a tu website, como el SEM (campañas en Adwords) o la publicidad de pago en redes sociales (Facebook Ads); pero sus resultados no son duraderos, con lo cual, finalizada la campaña, el flujo de visitas a tu sitio cesará.
El posicionamiento orgánico en buscadores, que es de lo que se ocupa el SEO, consigue que tu web tenga lo que hay que tener para que aparezca justo cuando alguien está buscando información relacionada con tu producto o servicio. ¡Por eso es tan interesante para las empresas!
Pero lo primero en SEO es auditar la página web que deseamos optimizar.
¿Qué es una auditoría SEO?
Como disciplina dentro del marketing digital, el SEO forma parte del llamado inbound marketing o “marketing de atracción”.Se trata de un tipo de marketing que atrae a usuarios que están buscando información relacionada con tu producto o servicio para satisfacer sus necesidades.
Y para atraer al máximo número posible de usuarios (entre los que se encuentran los futuros clientes), el SEO trata de cumplir con una serie de estándares de calidad y de relevancia que Google y otros buscadores establecen para los sitios web.
Es cierto que existe otra vertiente del SEO que consiste sobre todo en engañar a los motores de búsqueda (SEO black hat); pero ese otro tipo de técnicas SEO no nos interesan, porque entrañan un gran riesgo de penalización por parte de los buscadores.
Son procedimientos que no se suelen aplicar a páginas web de empresas, sino a proyectos cuya única finalidad es ganar dinero rápido, antes de que el sitio sufra una penalización en buscadores.
¿Cómo se hace una auditoría SEO?
La fase de auditoría debe realizarse de forma previa a toda acción orientada al SEO. En la auditoría se evalúa el estado de la página web en los buscadores, se identifican problemas, aspectos que se pueden mejorar y oportunidades para realizar optimizaciones.
Normalmente, en una auditoría SEO se elabora una o varias checklists con todos los aspectos que se pueden evaluar en relación al estado del site a nivel de posicionamiento web.
Una gran parte del trabajo se realiza con herramientas de software, aunque existe un importante componente estratégico que necesita de profesionales expertos en SEO.
¿Qué se evalúa cuando se audita el SEO de una web?
Una auditoría SEO es un proceso bastante técnico, aunque podemos mencionar los aspectos más importantes.
#1. Indexación de páginas
Las páginas indexadas por Google son aquellas que son rastreadas y aparecen en el buscador (independientemente de que estén bien posicionadas o no). El problema es que no siempre están indexadas las que deberían estarlo, y otras que sí deseamos que se indexen a menudo no lo hacen.
Esto sucede especialmente en las tiendas online, debido a que constantemente se generan nuevas páginas con productos, se retiran otros que están fuera de stock o que ya no se ofrecen, se generan url dinámicas, etc.
Como resultado, algunas páginas arrojarán error 404; y se deberán redireccionar a otras páginas (productos relacionados, categorías…); etc.
Para que las páginas sean indexadas deben estar enlazadas entre sí, haber sido incluidas en el Sitemap, y no estar bloqueadas por robots.txt o meta robots.
Si algunas de las páginas que deseas que aparecen en los buscadores no están indexadas, tienes un problema.En este caso, la herramienta más básica y utilizada por todos los consultores SEO para comprobar la indexación de las páginas nos la da el propio Google. Se trata de Search Console.
También podemos poner en el buscador el comando site: (seguido de la url completa que queramos comprobar) si no arroja ningún resultado la página no está indexada.
#2. Visibilidad en los buscadores
Una vez hemos averiguado si existen problemas graves de indexación, y tras confirmar que las páginas del dominio que queremos que aparezcan en Google están indexadas mediante el comando site:midominio.com , debemos averiguar qué posición ocupan en los resultados de búsqueda, por cada una de las palabras clave importantes para tu negocio.
Importantes son aquellas palabras relacionadas con el sector de nuestra empresa que atraen tráfico a nuestra web. Debemos preguntarnos ¿Qué busca nuestro cliente potencial? y ¿Cómo lo busca?
¿Y cuáles son esas palabras? Pues las que van a utilizar tus clientes para encontrar los servicios como los que ofreces.
La herramienta probablemente más utilizada para ello es SEMRush, aunque existen otras como Sixtrix que también permiten hacerlo.
#3. Factores de SEO on-page
Son los que corresponden únicamente con factores internos de tu página web.
En este caso, la checklist de factores que puedes analizar es muy extensa:
URLs canónicals:
Es muy frecuente que se pueda acceder a un contenido desde URLs diferentes. Cuando esto sucede corres el peligro de sufrir una penalización por contenido duplicado.
Las URLs canónicals le dicen a los buscadores qué página tiene prioridad para que no se dupliquen contenidos.
Estructura las URLs:
Además de utilizar canonicals, la forma de las URLs debe ser amigable a los buscadores.Algunos CMS producen URLs de forma automática que aportan muy poco valor desde el punto de vista del SEO.
Las URL deben estar optimizadas, tanto en su estructura como en su contenido (dado que deben incluir palabras clave).
Velocidad de carga:
Aunque está incluido en el SEO on-page, la velocidad de carga o Web Performance Optimization (WPO) es un campo en sí mismo.
Cuanto más rápidamente carga una página web, mejor posicionamiento puede obtener en los motores de búsqueda. Que la página cargue rápido también en dispositivos móviles es fundamental para Google.
Enlaces internos:
Los links internos de la página no solo mejoran la navegación a través de tu web, también informan a Google sobre los términos de búsqueda que son relevantes para esa página.
Jerarquía de los contenidos:
Que estén bien estructurados, bien organizados por categorías y, en definitiva, bien organizados, también es un factor de SEO on-page importante.
Optimización de meta etiquetas en los contenidos:
Las etiquetas meta son las que informan a los buscadores acerca de los contenidos. Sin embargo, algunas también son visibles a los usuarios, como las etiquetas title, meta description en los resultados de búsqueda, o el atributo Alt de las imágenes cuando sitúas el ratón sobre ellas.
Para conseguir un buen posicionamiento en buscadores es imprescindible optimizarlas con un título atractivo y etiquetas alt con palabra clave o sinónimo de palabra clave.
Factores de edición de los contenidos:
No referimos por ejemplo al uso de negritas y cursivas en el texto, que pueden seguir criterios de edición, pero que también pueden ayudar a llamar la atención sobre palabras clave y términos de búsqueda relevantes.
Su influencia es moderada, pero junto con otros factores pueden ayudar a optimizar el SEO de tu página.
Hay muchas herramientas que nos ayudan llevar a cabo una auditoría SEO a nivel on-page, como Pingdom para la velocidad de carga, o SEOquake o Screaming Frog para evaluar la optimización de los contenidos.
#4 Factores de SEO off-page
Una vez testados los factores on-page, hay otro tipo de áreas del SEO que no dependen exclusivamente de elementos o acciones internas al sitio.
La gran mayoría de estos factores se reducen a una cosa: Enlaces externos. Una de las formas más efectivas que tiene Google para medir la autoridad de un sitio es contabilizar los enlaces externos (procedentes de otras páginas web, foros de debate, redes sociales, etc.).
Y no solo importa la cantidad, sino también la calidad. La importancia de los enlaces externos o backlinks se debe a que, cuando algo gusta o resulta útil, es mucho más probable que se cite o se recomiende (es decir, que se enlace).
Desde el punto de vista del SEO off-page, los aspectos más importantes para auditar son:
Autoridad
Es la “confianza” que Google proporciona a un dominio y/o sus páginas. Un enlace desde una web de autoridad resulta mucho más relevante que si procede de un site sin autoridad. Así, el buscador asigna la relevancia de cada website para priorizar unos resultados sobre otros en las búsquedas de los usuarios.
Google proporcionaba su propia medida de autoridad con PageRank. Pero en la actualidad está en desuso.
La autoridad que Google otorga a las páginas web se contabiliza gracias a las herramientas de MOZ toolbar y Open Site Explorer, y las métricas que utilizan: Domain Autority (para los dominios) y Page Authority (para las páginas individuales).
Perfil de enlaces
Con ayuda de las métricas de autoridad del punto anterior podemos elaborar un perfil de enlaces que nos indique hasta qué punto los backlinks que ha recibido nuestra página web nos están beneficiando o perjudicando para el SEO.
A menudo podemos recibir enlaces tóxicos (de sitios con muy baja autoridad o que han sufrido penalizaciones) que nos perjudiquen. En otros casos, es el propio webmaster el que cae en el error de abusar de las prácticas penalizadas para construir su perfil de backlinks.
La actualización de septiembre de 2016, esta actualización del algoritmo de Google que detecta enlaces construidos de forma artificial para influir en los resultados orgánicos actúa en tiempo real.
En lugar de imponer duras penalizaciones a las empresas como hacía Penguin en el pasado, ahora los enlaces de mala calidad sencillamente dejan de contar para el SEO.
Sin embargo, es mejor estar alerta, porque los perfiles de enlaces poco naturales (fruto de técnicas SEO agresivas) pueden suponer una penalización manual para la página web.
Para este punto en concreto, la herramienta Ahrefs nos aporta un gran valor para auditar el estado del SEO off-page basado en enlaces.
Factores UX
Los factores de User eXperience (UX) o “experiencia de usuario” se refieren a cómo los usuarios interactúan con el sitio web.
Cuanto mejor sea esa interacción, más pueden ayudar los factores UX al posicionamiento en buscadores de tu sitio.
Algunos de los indicadores UX que nos pueden interesar al realizar una auditoría son
CTR: el Click Through Rate es el porcentaje de clicks que recibe tu sitio cuando aparece en los SERPs.
Tasa de rebote: usuarios que abandonan la web tras visitar solo una página.
Tiempo medio de sesión: la media de tiempo que pasan los usuarios en la web.
Páginas vistas por sesión: el número de páginas que ha visitado cada usuario en una sola vez.
Estas cifras nos informan sobre la usabilidad del sitio, el valor que aporta la website a los usuarios, etc. Muchas de las métricas de UX nos la proporciona Google Analytics.
Cuando métricas como estas arrojan resultados preocupantes, es hora de hacer cambios para mejorar la experiencia de usuario.
Y hasta aquí llegamos con el post de hoy, sobre auditorías SEO.
Si navegas a la deriva en los resultados de búsqueda estás perdiendo ventas potenciales. Pon a punto tu SEO, ¡y aprovecha las ventajas de estar entre los primeros!